REALIZADAS CELEBRACIONES POPULARES EN LA LOCALIDAD DE CATA EN EL MUNICIPIO COSTA DE ORO DEL ESTADO ARAGUA.
COINCIDIENDO LOS FESTEJOS POR DEL DIA DE CORPUS CRISTI Y LA VISPERA DE SAN JUAN BABUTISTA.
Por Luis Alfredo Valles Silva
Investigador de Tradiciones
El próximo pasado jueves 23 de junio, al igual que en otras comunidades del país, (Naiguatá en Vargas; Yare en Miranda y Puerto Cabello y Patanemo en Carabobo), asi como en las aragüeñas localidades de Cuyagua, Chuao, Turiamo y Ocumare de La Costa, en la pintoresca y acogedora localidad de San Francisco de Cata, tras las constantes interrogantes de propios y visitantes de cómo se haría para cumplir y sacar adelante y en las mejores circunstancias estos dos trascendentales eventos locales, dado que los participantes en ambas manifestaciones colectivo-populares son prácticamente los mismos, todo salió, inclusive, mejor de lo que se esperaba.
Para el jueves 22 reinaba en la comunidad una contagiante alegría, ya habían llegado, casi todos, los “cateros” y “cateras” (gentilicio del habitante de Cata) los cuales en busca de mejoras sustanciales del modo de vida, han debido abandonar su lugar de origen y en la actualidad residen en la gran Caracas la mayoría y otros tantos en Maracay la Capital aragüeña, aunque hay cateros en Carabobo y Mérida.
En la tarde noche se socializó, por parte nuestra y con la mayoría de los jóvenes del pueblo, la socialización para la elaboración del forraje de tambores sanjuaneros al estilo afroyaracuyanos y afrocarabobeños, estilo que poco a poco ha venido imponiéndose en las comunidades de tamboreros, dado que el mismo, por el empleo de aros que fungen de prensadores naturales, los mismo elaborados con bejucos silvestres y entorchados alambre liso, no requiere del empleo del fuego para ser tensados, sino que basta con golpear directamente sobre los clavos que sujetan a los respectivos aros, ello estimando que el estilo de forraje del tambor local es con pieles de res y tachuelados, que para lograr el temple deseado deben periódicamente calentarse al fuego mediante el empleo de ramas secas y periódicos o cartones, lo cual causa que las manos de los ejecutantes se resientan, ello estimando que los mismos tocadores de los tambores serían los danzantes del santísimo sacramento de la mañana siguiente, les indujo a buscar una manera de alivianar esa, posible molestia en las manos, les indujo a probar con esta otra modalidad de forrado, sin embargo en el pueblo seguían estando los otros tambores forrados a la usanza tradicional, por si el ensayo no se haría satisfactorio.
Mientras la mayoría de jóvenes realizaban el forraje de tambores, otros, aun mas jóvenes, casi todos adolescentes preparaban sus accesorios para el atuendo de Danzantes de Corpus Cristi, unos completaban las mascaras, colocándole los detalles como ojos, nariz y bocas; las infaltables cintas multicolores de raso, el velo en tela de tul, la elástica sujetadora, entre otros detalles; las medias de nailon, las alpargatas, que si las maracas, que si los cencerros (campanas que se colocan a la cintura para acompañar la típica música mientras danzan), que si el rabo (cola que pende de sus cinturones, allí, como en otras comunidades danzantes de corpus, se mantiene que diablo sin rabo o cola no es diablo), entre otros detalles; mientras esto acontecía a cada instante los moradores hacían detonar fuegos artificiales (cohetes) tratando con ello de inferirle un toque mas de alegría a la ocasión. Una vez culminado el forraje de los dos cumacos de prueba, todos nos dedicaríamos a los regulares comentarios cotidianos, hasta que cada quien tras su dinámica natural se fue retirando a sus respectivos hogares a descansar para aguardar la jornada del siguiente día 23 de junio.
A la mañana del anhelado 23 de junio, desde tempranas horas se reanudaron las detonaciones de los fuegos artificiales, lo que, indudablemente, se convirtió en un llamado a los danzantes del Santísimo Sacramente (Diablos Danzantes) locales, quienes velozmente se iban dirigieron a la casa de habitación del actual “Perrero” (“Arreador” en otras localidades), este cargo lo ejerce en Cata, desde Hace mas de 30 años el Cultor Alí Hernández, cargo que le ha impreso su sello, pues todo el mundo le conoce con el “remoquete” o apodo de “Alí el Perro”, o “Alí el Perrero”, anteriormente los danzantes se trajeaban en la abandonada, a la desidia oficial Casona “La Nasa”, antigua sede o centro de Acopio del Cacao del pueblo, hoy día, tras varios intentos de restauración, solo un mínimo porcentaje de su total área ha sido rehabilitado, donde funciona la sede de la actual cooperativa local de Chocolate artesanal (“La Chocorrumbita”).
Tras haberse reunido en casa de “Ali El Perrero” ya todos los danzantes estimados, alrededor de unos cien (100) participantes (todos de sexo masculino) se dio inicio a la Danza, mientras los danzantes emergían, convidados por las contagiantes notas armoniosamente que emitía el cuatro como instrumento acompañante, todos y cada uno de ellos con sus característicos ademanes expresivos, sonando su respectiva maraca y acompañados por el metálico sonido de sus campanas o cencerro, no cesaban las detonaciones de los fuegos artificiales, el resto de moradores del pueblo, asi como el gran número de visitantes, entre curiosos e investigadores formamos una calle de acera a acera dentro de cuya área bailaban los danzantes, al culminar la salida de todos los “diablos danzantes”, el total de ellos se dirigió, en perfecto orden y danzando, a la Iglesia del Pueblo, la misma bajo la advocación de San Francisco de Asís, patrón eclesiástico local , al igual que la comunidad en sí, al llegar al pórtico del templo, a la entrada se apreciaba el sin número de luminarias o veladoras (entre velas y velones) que previamente habían encendido los devotos del santísimo (danzantes y pagadores de promesas), allí todos los danzantes de Corpus locales se rindieron en solemne admiración o contemplación devocional, y cabe destacar, que aún siendo el propio día de la solemne majestad, como es considerado el Corpus Cristi en esta y otras comunidades devotas, allí para ese día no se realiza la Santa Eucaristía (Misa) respectiva, ello debido a que la Parroquia Ocumare de La Costa de Oro, a la cual se acogen territorial y eclesiásticamente, está conformada por las comunidades de Cata, Cuyagua y Ocumare, está última, capital del Municipio del mismo nombre, y que con tal condición merece la prioridad de que el único sacerdote o prelado de la Iglesia Católica asignado al Municipio realice allí la correspondiente eucaristía de rigor, asi pues que las otras comunidades se ven en la honrosa obligación de, danzar, aunque de manera simbólica, y un día, previo acuerdo, solicitan de manera formal por ante la curia diocesana respectiva la fecha cónsona con la disponibilidad de los danzantes, ello por la razón antes expuesta de que muchos por circunstancias de trabajo y/o estudios residen en otras ciudades del país, no obstante la única diferencia de la fiesta del Santísimo Sacramente del propio dia de Corpus Cristi en Cata, radica en la ausencia del Sacerdote y por ende la misa con lo que ejecutan en esta ausencia, igual se postran (aunque de manera simbólica ante la iglesia y como si estuviese la Imagen del Santísimo o Custodia), realizan sus danzas y recorren la comunidad, emulando las acciones de los bisabuelos que danzaron antes y que hoy día se admiran y recuerdan con afecto y eterno agradecimiento por la herencia cultural legada.
Notamos como con toda regularidad la inclusión de nuevos danzantes, quienes tras un periodo minucioso y de estricta formación tanto danzaria como religiosa accesan a la hermandad, es importante destacar, que en esta manifestación quienes dancen deben conocer los secretos de la Diablada y saber las oraciones de la liturgia católica, bajo cuya religión se acogen. Asi mismo es de resaltar que en esta ocasión, por el gran número de danzantes, se contó con la presencia de dos perreros, es decir que el Oficial “Alí El Perro” Hernández, fue apoyado por otro que emuló sus acciones, ello para controlar, lo mas efectivamente, la ejecución de todas las danzas y rituales que caracterizan esta Cofradía o Hermandad de Danzantes devotos del Santísimo Sacramento del Altar, allí apreciamos que los miembros con gran dominio realizaron sus danzas, entre las que cabe destacar nombrar “La Danza Cruzada, la Danza de la Guacharaca, el Caracol, su típica figura o disposición de “a dos en fondo”, las danzas para rendir y pagar, no realizaron la ancestral danza de “El Mono Quitungo”, porque para ejecutarla la misma debe pagarse, es decir que alguna persona pague al Capataz de la Diablada (Máxima Autoridad jerárquica en la misma) para que en el interior de su hogar sea realizada, se estima que es una danza muy poderosa a nivel de ancestrales creencias familiares.
Entre otros acontecimientos, los asistentes a los eventos tuvimos la oportunidad de apreciar los rituales de honor que los danzantes devotos actuales realizan a los antiguos danzantes vivos, ello nos hace recordar antiguos rituales de las culturas africanas aun vigentes en ese milenario, para muchos enigmático, continente; los danzantes visitaron los hogares de miembros de la cofradía de alto rango dentro de la misma, asi como al de antiguos danzantes, hoy dia inactivos hasta altas horas de la tarde, motivo por el cual algunos de ellos, tuvieron que salirse de su danza devocional y otros tantos llegaron tarde al embarque de San Juan, evento que por lo general y desde tiempos ancestrales se realiza desde tempranas horas de la mañana, pues como anteriormente hemos citado, ambas estuvieron cruzadas, es de acotar, que según los cálculos de los viejos sabios de la comunidad (libros vivientes) para el año 2038, dentro de 27 años, contando a partir de este 2011, coincidirán el mismo 24 de junio tanto el día del Corpus Cristi como el dia de San Juan Bautista, imaginémonos entonces la dicha plena que gozarán quienes tengan la oportunidad de presenciar este magnífico acontecimiento.
EL EMBARQUE DE SAN JUAN.
Motivado a que anduvimos acompañando a los danzantes del Corpus Cristi (Diablos Danzantes) e igual compartimos con ellos del tradicional Sancocho que se les brinda en su honor en el pueblo, se nos hizo un poco tarde para participar en el devocional y tradicional acto del Embarque a San Juan Bautista, evento en el cual desde hace alrededor de 10 años venimos participando. Luego de las dos de la tarde nos trasladábamos hasta la Bahía e Cata, lugar desde donde los sanjuaneros locales realizan el llamado embarque (paseo en lanchas) hasta el sitio de La Boca de Ocumare de La Costa, sitio donde convergen casi todos los sanjuaneros con sus respectivas imágenes devocionales de San Juan Bautista, de pueblos de Aragua y algunos de Carabobo, gracias a Dios, la persona que nos trasladaba en su camión intuyo, que debido a lo tarde ya las lanchas cateras debían de haber salido y que era mejor que nos llevase directamente por vía terrestre hasta el lugar de La Boca, acción que corroboramos pues en una de las curvas del camino de subida, pudimos apreciar en la mar de Cata, y nos alegramos, pues realmente la estimación de este amigo estaba bien fundada, y a lo lejos vimos, aunque con un tanto de nostalgia, a las lanchas donde se trasladaban los sanjuaneros y por ende la imagen del Santo de Cata, el amigo nos dejó en una vereda que da acceso inmediato a La Boca de Ocumare, tras unos 100 o 200 metros a lo sumo de camino a pie, llegamos al lugar previsto para el reencuentro de los sanjuaneros, al instante arribaban los Cateros con su parranda, a la cual de inmediato nos integramos, el devoto que fungía de burro de San Juan de Cata, en esta ocasión lo representaba el joven cultor Joe Luis Hernández Díaz, conocido popularmente en la región como “El Ruso”, quien portaba la imagen que representaba a los sanjuaneros de Cata, es de destacar que es esta la primera ocasión, en la cual, por decisión de los propios sanjuaneros de Cata que la imagen oficial, es decir la imagen del Santo que, en Cata, se venera desde hace mas de un siglo, imagen a la cual dan a llamar “El Primero” no fue trasladada al sitio de la boca, esta permaneció en uno de los puestos de venta de pescado en el bahía de Cata, en su lugar se llevó la del llamado “Segundo”, imagen que la comunidad adquirió hace 4 años, considerando lo delicada y valiosa, por antigua, de la imagen del oficial o “Primer” San Juan, al esta imagen sustituta o suplente en su mejor estimación, ser colocada en el mesón del galpón que para ello construiría hace algunos años la Municipalidad, de seguido se dio inicio a los golpes de tambor trancados, tuvimos la oportunidad de disfrutar y participar en los cantos de golpes de plaza que interpretaron los cultores cateros que asistieron al tradicional reencuentro, asimismo disfrutamos los de otros cultores de las demás localidades que se apersonaron al evento. En el lugar de la boca permanecimos conjuntamente con los cultores hasta alrededor de las 6 de la tarde, hora a la cual nos dispusimos a regresar a la orilla de la mar donde nos aguardaban las respectivas lanchas para regresar a Cata, con la entonación de cantos de sangueos llegamos la playa local y poco a poco nos enlanchamos, según las posibilidades de cupo en las lanchas disponibles, de seguido nos abrimos a la mar de regreso a la Bahía de Cata, al llegar a esta nos aguardaba un gran número de personas, unas que no tuvieron la dicha de ir al lugar de La Boca de Ocumare y otros que ya habían regresado de esta, en lanchas que zarparon anteriormente a nosotros, asi fuimos concentrándonos en el quiosco donde se hallaba en su altar adornado, la imagen del San Juan Primero, donde algunos devotos comenzaron a dedicarle y dedicarse los llamados “Cantos de Sirenas” a manera de coplas o versos rimados a capela, luego comenzaron a sonar nuevamente los cumacos afuera del recinto, allí la Señora Victoria Croquer, hermana, por cierto, del muy admirado y afamado cantante Nacional, Francisco Pacheco, el otrora solista estelar de la, también afamada agrupación nacional “Un Solo Pueblo”, y hoy día con su propia organización Musical “Francisco Pacheco y su Pueblo”, nos deleitó como, todos los años, con su gran y particular estilo de cantar, al cabo de un tiempo, ya entrada la noche, los cultores decidieron emprender el regreso al propio pueblo de Cata, a este regreso de “cateros” se incorporó la Sagrada imagen de San Juan Primero el que estuvo desde tempranas horas en el quiosco de venta de pescados, es asi como dependiendo de la disponibilidad de transportes fuimos regresando a Cata Pueblo, cuando nosotros regresábamos y pasábamos vía al centro poblado, por el lugar llamado “El Castaño” caserío a las afueras del propio centro poblado en si observamos que aun estaban, tanto los parranderos como las imágenes de los sanjuanes, allí haciendo las tradicionales visitas a las viviendas del sector, seguimos tras decidir aguardar a la comitiva tanto a la imágenes como a los sanjuaneros en el propio pueblo de Cata, cuando entramos a este, ya venían algunos de los pobladores con sus banderas a recibirlos en la entrada del pueblo, sitio cercano a las Ruinas de la antigua “Obra Pía” del lugar. Mientras nos preparábamos y cenamos, oímos la detonación de mayor número de fuegos artificiales, lo que indicaba que ya las imágenes de San Juan El Bautista estaban en el pueblo, al instante nos integramos al sangueo o paseo por el pueblo, un centenar de banderas lo inundó, los roncos sonidos de los cumacos retumbaban en las mentes y corazones de los allí presentes, mientras e avanzaba al centro mismo del pueblo se integraban mas personas a la procesión musical, era casi imposible avanzar dada la afluencia de personas, sin embargo nos fuimos abriendo paso de cerca a las imágenes y apuntadores o solistas de turno, a la llegada a las cercanías de la Sede de la Sociedad de San Juan Bautista de Cata recibieron al sangueo con una de las tradicionales llamadas “Bombas”, globos aerostáticos artesanales que algunos devotos obsequian en honor a San Juan Bautista, en ocasiones son muchos los que van soltando a medida que el sangueo atraviesa el pueblo, seguido la parranda avanzó hasta la Iglesia del pueblo, una vez allí las detonaciones de los fuegos artificiales no se hicieron esperar, integrándose a su retumbar las campanas de la Iglesia, cuyo sonidos armonizaban perfectamente con los roncos sonidos de los cumacos, que en los hombros de su tocadores se desplazaban junto a las claras y armoniosas voces de los cantadores del pueblo, al instante los cumacos fueron al suelo, de seguido se trancaron los golpes de plaza y Francisco Pacheco, que venía interpretando, entre otros, algunos sangueo; cantó para alegrar una vez mas a sus coterráneos y a visitantes, al cabo de un tiempo volvieron los cumacos a los hombros de sus portadores y se reanudaron los cantos de sangueos, volvieron las banderas multicolores a inundar el lugar y asi se dirigieron a la casa de la Sociedad de San Juan Bautista, donde un incomparable Altar, adornado con lazos, pañuelos multicolores y exóticas flores esperaba a las imágenes tanto de “El Primero” como de “El Segundo”, estas tras un ritual de paseos continuos y galanteos, entre otros ademanes característicos, entraros y fueron colocadas en él. Al instante las banderas fueron guardadas y los cumacos colocados en medio de la calle, inmediatamente los golpes trancados no se hicieron aguardar y, gracias a Dios y a todos los presentes se encendió, en el mas sano sentido de la palabra, una parranda que los pobladores de Cata y las personas que desde años vivenciamos estas, no habíamos visto, sin parar un instante, mas solo los necesarios para ajustar en breves minutos los tambores que se aflojaban por tanto uso, cuando nos dimos cuenta, ya eran las cinco de la mañana y correspondía, como es la tradición el realizar el paseo y canto de “La Huerfanita”, este es un canto ancestral que se acostumbra en Cata, basado en la tradición oral local, se dice que la Madre de San Juancito va en busca de su tierno hijo, tal vez sea el producto de una confusión o mezcla de identidades y acciones, entre San Juan El Bautista y su Primo Jesús el de Nazaret y el de huérfana en lugar de huérfano (en diminutivo), pero fuese cual fuese la motivación, es una tradición que se acostumbra en Cata, seguido se repite el Canto del Ave María al pasar por la Cañada (especie de desagüe de aguas de lluvias que atraviesa un sector del lugar) y en donde la legendaria y antigua Abanderada, Custodia y Capitana de la Festividad de San Juan Bautista , además de cantadora local Paula Elvira Croquer, la Madre de Francisco Pacheco y de todos sus hermanos, acostumbraba a interpretar este Canto del Ave María, como aun se acostumbra hoy día, de seguido nuevamente el canto de la huerfanita, se recorre asi el pueblo y los parranderos que integran este grupo, ya reducido casi a un total de unas 20 o 25 personas, a lo sumo, se dirige a la que fuera casa de la ya mencionada Cultora Paula Elvira Coquer, donde hoy dia reside una de sus hijas y nietos, el que la parranda se ubique allí es tradición inalterable hasta los actuales momentos, allí se interpretan golpes trancados durante largo tiempo, mientras esto sucede muchos se dirigen al rio local, el cual se encuentra a escasos metros del lugar, a darse un bañito ritual, pues se estima y ello basado en la tradición oral local, que esa mañana las aguas corrientes se encuentran bendecidas o benditas y es sumamente beneficioso para la protección tanto corporal como espiritual, de hecho los mas devotos colectan o guardan agua de dicho rio en recipientes, a manera de Agua Bendita, para disimiles oportunidades.
En este día 24 de junio, y como en casi todos los años para esta misma fecha, la imagen del Bautista es “Robada”, es un término empleado en el lugar para designar la acción, en que un morador o una familia en sí, se lleva dicha imagen a su casa, con la intención de proseguir en ella la festividad, es decir es motivo de reanudar nuevamente la Parranda de Tambor Sanjuanera, en esta ocasión el simbólico “Robo” fue cometido por la Familia de la destacada cultora local Señora María Hermenegilda Díaz, madre, abuela y tía de sanjuaneros de larga estirpe y trayectoria local, hasta allí fuimos integrando la parranda que quedó luego de “La Huerfanita” y allá nuevamente, tras accesar a través de las empinadas caminerías que ascienden a la cumbre donde está ubicada la hermosa residencia de la Familia Díaz y Lira se formó una muy buena Parranda, la cual se prolongó por largo tiempo y la cual debimos abandonar por otros compromisos en el lugar, de esta parranda tuvimos noticias posteriores que se prolongó hasta bien avanzada la tarde, ya por la Noche se le realizó en honor a San Juan Bautista de Cata y su mundialmente festejado día un tradicional Velorio en casa de una de las dilatadas y mas devotas familias del pueblo.
Bueno una vez vuelto todo a la normalidad, solo quedan los comentarios de los bueno que salió todo, y el aguardar hasta, la fecha próxima de la Misa para el Santísimo Sacramento, que de seguro será el venidero mes de julio, lo sabremos luego cuando la directiva fije la fecha, e igualmente esperar, Dios primeramente, las próximas festividades del Corpus Cristi y San Juan Bautista, ediciones 2012.
Entre las Personas y personalidades que de una u otra manera andamos en este mundo de la cultura tradicional de los pueblos de Venezuela, asistimos a Cata en esta irrepetible experiencia, por Yaracuy:
Luis Alfredo Valles Silva
Luis Arturo Sánchez y
Alonzo Monagas-Monagas
Allí coincidimos con amigos de años, que igual que nosotros sientes especial interés por nuestras tradiciones, entre estos citamos a los del Grupo Nacional “Un Solo Pueblo”:
Jesús Querales
Ismael Querales y
Froila Gil;
De los Amigos del Ateneo de la Ciudad de El Tigre-Danzas Kamaanary, recordamos haber visto a:
Celia Magdalena Bastardo
Ludy Lozada y
Belén María Rodríguez,
Entre otros
Individualidades como:
Ismael Antonio Hernández (de Yaracuy)
Rolando Canónico (de Caracas)
José Carlos León García (de San Fernando de Apure)
Así como un buen número de agrupaciones de danzas del país, que portaban en sus uniformes los nombres de las compañías danzarias a las cuales integran, pero cuyos nombres escapan a nuestras memorias en este momento.
